La sopa paraguaya es un platillo típico de la
gastronomía paraguaya y del nordeste argentino en donde no solo se habla
castellano sino también guaraní. Los guaraníes suelen consumir platos
elaborados con harina de maíz de color amarillo (no polenta), huevos, quesos y
leche. La sopa paraguaya no es precisamente una sopa (es decir algo líquido y
caldoso), sino se trata de un bizcocho salado y esponjoso, rico en calorías y
proteínas.
Ingredientes
300g de harina de maiz
500c.c. de leche
3 cebollas grandes
300g de queso fresco
100g de queso rallado
4 huevos
Pimienta negra molida
Sal
Aceite
Elaboración paso a paso
Pela y corta la cebolla bien fina y rehógala con un poco de aceite en una
sartén hasta que se transparente. Salpimienta al gusto.
Bate los huevos en un recipiente con ayuda de un batidor de alambre o una
batidora eléctrica hasta que se tornen espumosos.
Coloca la harina de maíz en un recipiente amplio y añade la cebolla, la leche,
la sal y la pimienta al gusto.
Mezcla nuevamente y vierte los huevos y el queso fresco cortado en cubos
pequeños. Trata de que no queden grumos.
Integra los huevos con movimientos envolventes con ayuda de una espátula y
vierte en una bandeja apta para horno engrasada con aceite.
Espolvorea con queso rallado y lleva a horno medio durante 30 minutos o más
hasta que esté dorada la superficie y hasta que al pinchar la sopa paraguaya
con un palillo, este salga limpio.
Deja enfriar y corta en cuadrados.

Si no te gusta el queso cremoso o simplemente tienes mozzarella en tu casa,
puedes sustituirlo sin problema e incluso mezclar quesos para que el resultado
de la sopa paraguaya sea mucho más sabroso. Si quieres probar otra variante de
esta sopa, puedes cocinar maíz y desgranarlo para después incluir los granos en
la receta junto con la cebolla.
0 comentarios:
Publicar un comentario